¿Cómo conservar el café en grano o molido?
¿De qué sirve elegir bien su café entre los mejores lotes, si es para dejarlo alterar con un método de conservación inadecuado? El café es un producto sensible y para preservar sus aromas, es necesario tomar ciertas precauciones.
¿Cuánto tiempo se conserva el café?
El café no es un producto perecedero y no hay riesgo en consumir granos olvidados en el fondo de un armario durante meses. Sin embargo, el sabor del café puede alterarse rápidamente, especialmente si las condiciones de conservación no son óptimas. Por eso, generalmente se encuentra en los paquetes de café una fecha de consumo preferente (fecha límite de utilización óptima). Para disfrutar de las cualidades gustativas de su café, se recomienda no sobrepasar esta fecha que comienza justo después de la fecha de tueste.
¿Café en grano y café molido, cuál es la diferencia para la conservación?
Las instrucciones de conservación son ligeramente diferentes para los cafés molidos o en grano. De hecho, el café en grano se conserva por más tiempo. El café molido ofrece una mayor superficie de contacto con el aire ambiente. Por lo tanto, la molienda se oxidará más rápidamente, y el sabor del café se desvanecerá poco a poco. En general, se considera que un café molido se conserva dos veces menos tiempo que un café en grano, es decir, apenas unas semanas. ¡Los puristas incluso afirman que después de unas horas, sus cualidades organolépticas ya están alteradas! En cualquier caso, es cierto que cuanto más fresco es el café molido, más rico e intenso es su sabor. Por lo tanto, es preferible comprar su café molido en pequeñas cantidades y consumirlo rápidamente después de abrirlo.
Cómo conservar bien el café en grano
El sabor de un café depende en gran parte de los aceites que contiene. Para preservar su oxidación, es necesario proteger el café del aire, de la luz, de la humedad y de temperaturas extremas, ya sean cálidas o frías. Para ello, se debe elegir un lugar seco y a la sombra. Por ejemplo, puede guardar su café en grano en un armario o simplemente en una caja opaca. Para limitar el contacto con el aire ambiente, es preferible optar por una caja hermética con un sistema de vacío, o al menos de un tamaño adecuado a la cantidad de café.
Existen productos especialmente diseñados para conservar los cafés en grano y proteger los aromas. Prácticas y estéticas, las cajas Airscape son perfectas para los amantes del café.
Café molido: consejos de conservación
Una vez que se abre el paquete, el café molido pierde rápidamente calidad. Más aún que el café en grano, teme a la luz, la humedad y las diferencias de temperatura. Opte por una caja de conservación opaca y hermética y guárdela en un lugar cerrado, lejos de cualquier fuente de calor. Para poder preparar su café con café molido lo más fresco posible, se recomienda comprar pequeñas cantidades a la vez para no tener que almacenar el café durante mucho tiempo. Otra solución si usa café molido es comprar café en grano, que se conserva mejor, y molerlo según sus necesidades con un molinillo manual o eléctrico.
Cafés en cápsulas: una conservación ideal
El café en cápsulas protege los aromas y evita su alteración, siempre que las cápsulas estén envasadas individualmente. Nuestras cápsulas de papel natural tienen un embalaje reciclable, que protege el café de la luz, la humedad y el oxígeno. Una vez abierto el estuche, las cápsulas permanecen a salvo en su cubierta de cartón. Te recomendamos abrir este embalaje en el último momento antes de preparar tu espresso para disfrutar de todos los sabores de los cafés en cápsulas Malongo.
