Un café con cuerpo, permanente en la boca y finamente acidulado que ofrece notas de frutos secos. Acompaña postres con mucho cuerpo hechos con chocolate o especias.
Leer másLos caficultores francocubanos, establecidos en el Oriente cubano desde el siglo XIX, han contribuido al desarrollo de la región. Las antiguas fincas fueron declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en el año 2000. Sus ruinas reflejan la Edad de Oro de una caficultura que todavía produce uno de los mejores cafés del mundo.
Cofinanciado por la Unión Europea, la Oficina del Conservador de la Ciudad de Santiago de Cuba y la Fundación Malongo, Los Caminos del Café implementa un emocionante programa de turismo responsable, que incluye la restauración de una antigua mansión en el corazón histórico de la ciudad de Santiago (Casa Dranguet) y la rehabilitación de antiguos cafetales en los alrededores, incluida la famosa Fraternidad.